Caótica Ana
Voy a verlas siempre. No siempre me gustan, y ésta no me ha gustado, pero vale la pena. Es su propuesta, y punto. Puede ser exasperante, pedante, ingenuo e infantil, pero es de los pocos que pretenden plasmar cierta poesía en imágenes, en palabras, en parábolas inquietantes. A ratos me indignaba, en ciertos momentos me conmovía, otras veces me retorcía en la butaca entre la desesperación y la obnubilación. Julio Medem pone un extraño entusiasmo adolescente en sus películas que le lleva a pasearse entre lo sublime y lo ridículo. Volveré a la próxima, cómo no.
Labels: cine
2 Comments:
Pues estamos básicamente de acuerdo :-)
Aun así, dos días después de verla, pienso en la peli de vez en cuando...creo que es una peli que le iría bien ver a mi hermana pequeña.
Y a mi hermano pequeño también, más que nada para que vea algo diferente a lo de siempre. A pesar de toda la ingenuidad del planteamiento, todavía hay imágenes que persisten en mi mente, especialmente esas puertas de los cuadros en las que se introducía la cámara.
Tierra y Los amantes... son difíciles de superar, creo.
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