Tuesday, May 01, 2007

El Regreso de los CaryGranes.

Justo cuando ya no esperábamos ningún sobresalto más, cuando nos creíamos libres de ellos y nos dedicábamos a la relajación y al filorepantingamiento, por sorpresa, cosmoerráticamente, aparece un nuevo disco de los CaryGranes. Yo a esto no le llamaría resurreción, sino necrocidio. Y no es que llame la atención la irrupción de un nuevo dinosaurio en el mundo musical, es que esta vez parece que se inicia la era de la hipomosca. Y es que este traumazaroso disco no sólo viene con toda la antidisciplinante carga habitual de los CaryGranes, es que además con una sola vez que se oiga, se le puede aplicar el adjetivo de retroangustiante. A riesgo de que me acusen de hacer selenoescarnio, no se me ocurre otra manera de definir a esta omninadería cuasireptílica como un homenaje criminolácteo a lo dermatoetéreo. Ustedes saben que nunca me he dejado seducir por las neomilongas polilibertinas, y este disco sólo puede gustar a un público telermitaño o encefaloescéptico. El disco tiene dos estilos bien definidos, las canciones meteorolentas y las velocilerdas, pero ambos estilos son equipatéticos y equiparanoicos. La anglorrelinchante voz acostumbrada de nuestro cantante, que esta vez se marca un look heteroraro, con tendencia a la psicozafiedad, no hace más que confirmar el interdiarreico resultado: un disco geriordinario en honor a la puberprescindibilidad.

Labels: ,

1 Comments:

Blogger Paperback said...

Sí venga, que me voy a creer yo eso.

Wednesday, 02 May, 2007  

Post a Comment

<< Home

Creative Commons License
This work is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivs 3.0 Unported License.